martes, 6 de diciembre de 2016

MÉTODOS DE ENSEÑANZA DE LA LECTOESCRITURA



Los métodos más utilizados para enseñar a leer a los niños son: el analítico, el sintético y el mixto. El primero se basa en que el niño aprende a separar las letras, luego a formar sílabas y, por último, palabras. El segundo se centra en asociar significados a la palabra escrita completa. Ambos métodos son complementarios entre sí. El último sería fruto de la combinación de ambos métodos.

El método sintético, parte de las unidades mínimas hasta llegar a unidades mayores. Los niños comienzan por memorizar las letras, las sílabas, para llegar a palabras y frases. El método sintético resulta poco motivador, ya que se tiende más a la memorización y descifrado de signos aislados que a la comprensión de los enunciados. A continuación muestro un ejemplo de este método.
El método analítico, tiene la finalidad de enseñar a leer y a escribir por medio de palabras y oraciones, sin necesidad de que el niño llegue a reconocer los elementos mínimos. Sólo al final, el niño será capaz de reconocer las letras y sílabas que forman las palabras. Los métodos analíticos son más motivadores, pero en ocasiones suelen fallar porque el docente se olvida de cómo llegar a las unidades mínimas.

Los métodos mixtos,  son la combinación de métodos sintéticos y analíticos. Consideran que la enseñanza de los procesos de lectura y la escritura no debe hacerse únicamente a través de la aplicación de los métodos analíticos y sintéticos de forma separada, sino que lo ideal sería ir combinando ambos métodos, de acuerdo con el desarrollo de cada niño, ya que los niños tienen sus propias características y necesidades muy particulares, por lo que es imprescindible utilizar diferentes procedimientos para enseñarles a leer.
A continuación os indicaré una muestra de otros materiales que resultan muy interesantes para el aprendizaje de la lectoescritura. Uno de los más utilizados en las escuelas infantiles es Letrilandia. Sus personajes resultan muy atractivos y motivadores para los alumnos.















En definitiva, el profesor será el que deberá elegir el método más eficaz para sus alumnos, en función de sus carácterísticas, necesidades y desarrollo madurativo.

FORMACIÓN DE HÁBITOS Y RUTINAS


Lo primero de todo, sería establecer una distinción entre hábito y rutina, porque parecen sinónimos, pero no lo son. 
Las rutinas son aquellas actividades que realizamos cada día, de forma regular, periódica y sistemáticamente, con un carácter ineludible.
Hábito es el modo especial de proceder dada la adquisición de rutinas.

Los hábitos y las rutinas son esenciales para el desarrollo integral del niño. Los niños necesitan una serie de límites que les proporcionen seguridad y confianza. Los hábitos y las rutinas les transmiten esa estabilidad y seguridad que tanto necesitan, permitiéndoles conocer en qué momento del día se encuentran y anticiparse a lo que va a suceder. Por esta razón será necesario introducirlos lo más temprano posible.

A continuación veremos una serie de consejos para la implantación de rutinas y hábitos.

-Desde el nacimiento, es importante que el niño tenga un horario regular. Para ello será necesario establecer una serie de rutinas en cuanto al sueño, baño y comidas.

-Resulta imprescindible enseñarles a comer de todo, siguiendo una dieta mediterránea. Aprovecharemos, para enseñarles a comer despacio y a no hablar con la boca llena. Asimismo, aprenderán a utilizar correctamente los cubiertos y a no jugar con ellos.
                        
-Será necesario enseñarles a lavarse las manos antes de comer y a lavarse los dientes después de comer. Deben aprender que las manos son la principal vía de transmisión de enfermedades. Con respecto al hábito de lavarse los dientes, les enseñaremos que es fundamental para evitar la formación de caries.


-Resulta recomendable fomentar el hábito de la lectura. Habituarles a leer fomentará su interés y gusto par la misma. Asimismo, evitaremos el uso abusivo de la televisión, ordenador, consola, etc. Les enseñaremos que deben sentarse bien en la silla, para que no les duela la espalda ni se fatigue su vista.

-Es importante que los niños adquieran el hábito de acostarse pronto. Han de dormir más horas que los adultos, para despertarse descansados.

-Resulta imprescindible que los niños adquieran el hábito de orden y cuidado de las cosas. Han de saber valorar lo que tienen y cuidarlo.



-También es muy importarte enseñarles a respetar a los demás y al medio ambiente. El niño es un ser social y como tal, debe aprender a convivir en sociedad. Por esta razón, les enseñaremos a pedir las cosas por favor y a dar las gracias.


-Por último y no por ello menos importante, será necesario enseñarles a gestionar sus emociones y a tolerar la frustración. De esta manera evitaremos rabietas innecesarias.

jueves, 24 de noviembre de 2016

¿CÓMO ENSEÑAR A TU HIJO A LEER?

No es necesario seguir los pasos que vamos a mostrar en orden consecutivo, al igual que no los presentamos por orden de importancia, sino que son una especie de guía para ayudarte a ver los componentes de la lectura:


1 Léele a tu hijo/a: 
Debes empezar a leerle cuentos al niño siendo aún recién nacido: se tratará de un momento de unión especial para ambos y desarrollará su amor por los libros. 

2. Hazle preguntas: 
Hacerle preguntas al niño (cuando tiene dos o tres años) mientras se le lee un libro le anima y es muy eficaz para el desarrollo de su comprensión. De hecho hay muchos niños capaces de leer con una gran fluidez pero que no comprenden lo que están leyendo, y si no lo comprenden, no están realizando una lectura real ni productiva. Las preguntas durante la lectura harán que se desarrolle su vocabulario y que el niño interactúe con el libro.

3. Da buen ejemplo como lector:
Incluso si a tu hijo le fascinan los libros desde muy pequeño, su motivación decaerá si se da cuenta de que nadie más lee en casa. Si no lees con regularidad, tendrás que hacer un esfuerzo y leer más a menudo para que tu hijo vea que se trata de algo realmente importante. Los niños necesitan ver que sus padres/madres leen, porque si no, no saldrá de ellos coger un libro.

4. Enséñale a identificar las letras en entornos naturales:
Con esto nos referimos, por ejemplo, a las letras de madera que los niños suelen tener puestos en la pared de su habitación: son muchos los padres y madres que explican que gracias a ellas sus hijos han aprendido a deletrear su nombre o el de su hermana. A través de esta memoria visual y atencional, pueden realizarse otros aprendizajes como la hora (mucho más sencillo si tienes un reloj en la pared al que mirar día a día) o los números.
El hecho de que los niños aprendan el abecedario es muy importante, sin embargo, consideramos más importante el método de aprendizaje que hay que llevar a cabo para que adquieran tales conocimientos.

5. Incorpora muchas áreas de desarrollo:
Los niños llevan a cabo un mejor aprendizaje cuando tienen muchos motivos para esforzarse por ello: esta es la razón por la que aprender mediante la práctica, y no tanto mediante la teoría: da lugar a una mejor y más prolongada retención. Una vez que el niño se familiariza con las letras del abecedario, deberíamos tener en cuenta que su aprendizaje no es tan importante como su fonética, es decir, como su sonido. Por ello, consideramos necesario realizar actividades de juego en los que puedan poner en práctica su motricidad gruesa. Algo que también gusta mucho a los niños son las poesías, las canciones y las rimas. Recomendamos a los padres y madres que hagan una lista de las actividades o juegos que más gustan a sus hijos para que puedan adaptarse a ellas. 
6. Realiza una clasificación del género:
Una vez que tu hijo tiene alrededor de 5 años y que ya reconoce lo que es real y lo que es ficticio, podemos ayudarle a diferenciar los géneros de los libros: historias basadas en hechos reales, fantasía, ciencia-ficción, libros de música, libros de letras... Cuando un niño clasifica un libro dentro de un género concreto empezará a recordar sus detalles, realizará un esfuerzo por clasificarlo y tendrá que recordar otros libros que haya leído de ese mismo género. Esto no os llevará más de 10 segundos tras realizar la lectura.

7. Familias de palabras:
Llamamos familias de palabras a las palabras que riman. Enseñar a los niños palabras que rimen es una actividad fonológica que les ayuda a diferenciar patrones de lectura, lo que consideramos muy importante. Además de aprender sobre rimas de palabras, aprenderán sobre la lengua en sí misma!

8. Conciencia fónica:
Los fonemas son los sonidos más pequeños, compuestos por las consonante y las vocales. En este caso, la "conciencia fonológica" consistiría en aprender los sonidos dentro de una palabra (ponemos como ejemplo /K/ /a/ /s/ /a/).
La fonética en si misma implica aprender a deletrear los sonidos de las letras así como la normativa del idioma, y se trata de un componente importante dentro de la lectoescritura (aunque nunca debe tratarse del foco principal): aprender las reglas de la fonética debe ser una herramienta para que el niño aprenda a descodificar y deletrear las palabras en su camino hacia la lectura. 

9. Descodificar:
La descodificación suele referirse al "sonido que se expulsa". Se trata de un elemento importante en la enseñanza de la lectura al niño, aunque no es el más importante. Una vez que el niño conoce los sonidos de cada una de las letras del abecedario, tiene que aprender a juntar las palabras (desde las más pequeñas hasta las más largas). Esta actividad es complicada en ocasiones, pero es importante enseñarles de forma creativa para que les resulte más ameno y menos pesado.

10. Las palabras frecuentes:
Las palabras más frecuentes, las que más se utilizan en nuestro idioma, deben ser memorizadas por el niño para que pueda llegar a ser un buen lector. Los expertos afirman que es beneficioso para el niño realizar una lista con estas palabras populares para su memorización. 


Como ya habrás comprobado, no existe una fórmula mágica para que tus hijos aprendan a leer. Los pasos sobre los que hemos hablado son estrategias simples y efectivas para que a tu hijo le sea más fácil concienciarse sobre la importancia de la lectura. Al fin y al cabo, cada niño aprende de una manera distinta. No te desesperes, es importante inculcar muchos conocimientos durante la primera etapa educativa, más incluso que cuando se es un niño en la etapa de educación primaria.
En conclusión debemos tomar estas 10 pautas como una forma de mejorar a diario, pero tú eres quien elige cuales son las estrategias que mejor se complementan con el tipo de aprendizaje de tu hijo.